sábado, 10 de julio de 2010
pereza vital un sábado estival
Hoy he tenido un día perezoso; ya me he despertado con una pereza en el cuerpo que no quería ni levantarme, y además esta mañana para variar soplaba el viento por la ventana y tumbado y holgazaneando se estaba fenomenal... Al final M ha conseguido que me levantase, en parte gracias a que había preparado un desayuno cuyos olores llegaban ya hasta la habitación...
Decidimos ir a la playa, y no a las abarrotadas y sucias de Barcelona sino a la también llena de gente pero más grande y algo más limpia de Gavà-Castelldefels. Menos mal que M decide conducir ella y puedo ir medio zombie todo el viaje... Después del chapuzón y de despertarme del todo veo la cantidad de gente que estamos tumbados en la arena y a remojo en el agua, y recuerdo que esta misma tarde hay convocada una manifestación por no-se-qué-historias de no-se-qué-Estatut ya está celebrándose, y mañana hay otra manifestación, ésta futbolera, a tropecientosmil kilómetros, aunque con efectos más cercanos si gana "Ejpaña" (pitos, barullo en las calles, borracheras, petardos...). Y antes de medio-dormirme de nuevo concluyo que prefiero esta manifestación playera, más espontánea y menos manipulada, y encima con estupendas vistas al mar (y a las chicas en top-less que me rodean)...
Tras un segundo baño y ver que mi piel comienza a enrojecer, decidimos volver a casa a comer y siestear, lo cual me complace pues empiezo a estar un poco cansado de estar tumbado de manera incómoda en la toalla, del pringue de la crema solar y de la arena-peeling que tengo ya en medio cuerpo... Y ya me visualizo en el sofá después de comer... Y en el sofá estuve, pero no siesteando con alguna película de sobremesa de fondo, sino viendo una película demasiado cruda y realista que me quitó el sueño... Pero bueno, queda mucha tarde, me digo.
Y si, queda mucha tarde, pero la paso interneteando, mayormente para buscar algún viaje para las vacaciones de octubre; cosas de las ofertas de Internet: para conseguir un precio asequible apto para cardiacos necesitas planificarlo todo con meses de antelación, a mi que no me gusta planificar ni a 5 horas vista...).
Al final M me saca de nuevo de mi apatía (que haría yo sin M !!!! de momento sería más vago y apático...) y propone cenar fuera de casa, dudando entre un restaurante cubano cutrecillo y económico -que no conocemos- y un retaurante barcelonés de diseño más carete -que ya conocemos-... y como estamos en crisis y nos gustan las sorpresas, optamos por el cubano.
Ya os contaré en qué acaba este sábado perezoso, caluroso, playero, manifestoso, pre-futbolero... y gastronómico.
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Has fet molt malament, Pep. En vez de asistir a una manifestación sobre algo tan inocuo, inocente, poco manipulado y amistoso como el Estatut, vas y te las piras a la playa. ¿En qué cabeza cabe? Y luego, por si fuera poco, desoyes la voz de Ehpaña y eludes tu compromiso con los bullicios fumboleros. No es eso, no es eso, decía Ortega y Gasset.
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